Parece que la generación moderna finalmente ha concordado que un tatuaje no es un defecto o una marca criminal sino un tipo de adorno y una obra de arte. Además, no necesariamente tiene que significar algo. Por supuesto, es interesante cuando hay una historia detrás de esto, pero como podría decir Freud en nuestros días, “a veces un tatuaje es solo un tatuaje”. Pero, ¿qué pasa cuando no tienes una idea especial para el tatuaje pero aún así quieres un diseño original?